El Vía Láctea se viste de rockabilly

Ayer tocó sesión de cine (Azul oscuro, casi negro, que comentaré en su debida sección), y después unas cañitas, ya que la noche estaba muy agradable por Madrid. De la calle Princesa nos trasladamos poco a poco a San Bernardo, y llegamos a Malasaña donde comprobamos que ciertos garitos estaban cerrados, por lo que optamos por dirigirnos a l a plaza del 2 de mayo. Unos minis de cerveza y conversación filosófica nos llevaron a entrar en el Vía Láctea, sitio socorrido cuando estás por Malasaña y no te apetece meterte a la aventura en ningún local.

No se yo si sería ayer únicamente, o es que todos los miércoles son así en el local, porque nada más entrar me di cuenta de las pintas que por alli pululaban... auténticos rockabillies, con el pelo saturado de brillantina, camisas remangadas, vaqueros ajustados y zapatos de charol. Y patillas. Y gafas... Si os creéis que tan solo eran cuatro freaks sin importancia, os diré que no. El local le había dado al play a la pletina de música de los 50 (americana, como no...) y cada minuto entraba una persona disfrazada de rockero pasado de quintas. Y las chicas igual. Vamos, que hasta creí que me había sentado mal la San Miguel... Eso si, el local, en general, merece la pena.